1. A menudo, cuanto más popular o famoso es el astrólogo, menos entiende o sabe de astrología.

2. La astrología del signo solar no es, en modo alguno, astrología. La astrología del signo solar es un bien de consumo de la sociedad capitalista occidental contemporánea y tiene su origen en el Capítulo III del libro «Astrology for all» (1903) del empresario y ocultista británico Alan Leo.

3. Una idea sostenida a pesar de pruebas claras en su contra y, por lo mismo, falsa, constituye delirio o ilusión. Un astrólogo delirante es, por consiguiente, un astrólogo carente de la ciencia astrológica o del arte científico que es la astrología.

4. En medicina, un médico puede ser un buen cirujano y un mal médico (o viceversa), como en Derecho un abogado puede ser un buen litigante y un mal jurista o profesor de Derecho (o viceversa), como en astrología un astrólogo puede ser un buen intérprete y un mal académico o historiador (o viceversa).

5. Es el sistema de casas ahora en boga, signos enteros, el que no distingue casas de signos ni signos de casas al utilizar signos tanto como signos (segmentos del cielo o la eclíptica) como casas (segmentos de la superficie terrestre) simultáneamente. Solamente los sistemas de casas cuadrantes distinguen claramente entre dos planos astrográficos. Así, pues, solamente en un mapa natal de signos enteros podrían los signos y las casas hallarse totalmente fusionados (independientemente del reconocimiento de dos puntos de intersección fundamentales entre el Cielo y la Tierra, ya que estos no constituyen cúspides de casas).

6. Cualquier emplazamiento astrológico es necesariamente común a cientos de miles de personas, al igual que cualquier color de ojos y/o determinado gen. No es sino la composición o disposición astrográfica específica lo que establece la verdadera identidad de una carta natal, de la misma manera en que lo establece una secuencia o código de ADN específico. Mercurio en Piscis, por ejemplo, puede ser común a cientos de miles de personas, mientras Mercurio en Piscis *como* regente de la Casa III conjunto a Saturno *como* regente del Ascendente en trígono con el segundo regente (Morin, Libro 17) de la Casa III en Cáncer o Escorpio no (o solamente a un número muy pequeño de personas).

7. Cualquier análisis estadístico exige del analista comprender que no hay dos políticos, dos asesinos en serie o dos escritores que tengan la misma o casi la misma carta natal (aunque podamos establecer variables comunes que, aun así, serán solo causa suficiente, no necesaria). En otras palabras, un rasgo determinado (convertirse en político, asesino en serie o abogado, o contraer cáncer) no se produce por una única disposición astrológica. Estos rasgos se producen a través de distintas composiciones o disposiciones astrográficas, del mismo modo en que una misma enfermedad puede ser contraída de diferentes maneras por diferentes personas.

8. Cualquier mapa celeste es el mapa de más de 1.000 acontecimientos (mínimo) simultáneamente en ese lugar de la Tierra para el que dicho mapa fue o será levantado. Cada pocos minutos en un lugar determinado de la Tierra nace un niño o una criatura de otra especie y muere o es asesinada una persona, se firma un documento y comienzan viajes, desplazamientos y turnos de trabajo, por no mencionar colisiones de los tráficos tanto aéreo como terrestre, entre otros muchos eventos. ¿Cómo puede, entonces, un astrólogo competente distinguir el asunto o evento de que trata una carta determinada, que es lo mismo que preguntarse cómo puede un médico competente determinar el paciente o la persona a la que corresponden unos resultados de laboratorio (v. gr. un análisis de sangre)? No puede (lo cual no tiene nada que ver con la habilidad o la competencia).

9. En materia genética, los genetistas tienen en cuenta variables medioambientales con el fin de determinar en qué medida estos estímulos pueden modificar o modificarán la expresión o manifestación de una secuencia de ADN específica (persona) en una región, país y/o cultura determinada, e informar así sus análisis o pronósticos, del mismo modo que, en astrología, los astrólogos también deben respetar las variables medioambientales a las que se halla expuesto el individuo con el fin de poder determinar hasta qué punto dichos estímulos pueden modificar la expresión o manifestación de una carta natal específica (comportamiento del nativo) en una región, país y/o cultura determinada, e informar así sus análisis o pronósticos. La influencia del medio ambiente en la expresión del ADN se conoce como epigenética. La influencia del medio ambiente en la expresión de la carta astral podría llamarse epiastrología.

10. Como la meteorología, la medicina, la genética, la psiquiatría, la psicología forense y la economía, la astrología, aunque es una ciencia, no es una ciencia exacta (como las matemáticas, la astronomía, la química y la física). Por ello, los astrólogos, al igual que los meteorólogos, los médicos, los genetistas, los psiquiatras, los psicólogos forenses y los economistas, no deben hablar de predicciones sino de pronósticos. Las predicciones corresponden únicamente a las ciencias exactas, mientras que los pronósticos a las ciencias no exactas. (Las ciencias no exactas implican la evaluación de múltiples variables. Las ciencias no exactas no son independientes, como sí lo son las exactas, incluyendo aquellas hechas o creadas por el ser humano como, por ejemplo, las matemáticas y la lógica formal, que son ciencias exactas no naturales).
_____________

Más información aquí:

Página web: https://sagittariusdb.com/

IG: https://www.instagram.com/sagittariusdb_/

Investigaciones: https://davidbustamante.academia.edu/research